Reseña Yo Enseño, Pero Ellos Aprenden 70462q

ALIAT Universidades UNIVERSIDAD VALLE DEL GRIJALVA ESCUELA DE CIENCIAS DE LA EDUCACION

MAESTRÍA EN CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN EN DOCENCIA E INVESTIGACION

RESEÑA: YO ENSEÑO… ¿PERO ELLOS APRENDEN?

PINTO RODRÍGUEZ GABRIELA BERENICE

ASESOR:

MEZA MORALES JORGE LUIS

Comitán de Domínguez, Chiapas, marzo de 2017

DESARROLLO

Ficha bibliográfica:

Saint-Onge, M. (2000). Yo explico pero ellos... ¿aprenden? México, D.F: Ediciones Mensajero.

Presentación del autor:

Michel Saint-Onge.

Michel St-Onge, es conocido en el mundo de la educación superior. Como miembro del Grupo de Investigación Acción Performa en la Universidad de Sherbrooke (Quebec), tuvo la oportunidad de trabajar con asesores académicos sobre temas tales como el aprendizaje, la enseñanza, la evaluación formativa. Además, fue profesor de psicología en Quebec y África.

Resumen temático global: YO EXPLICO, PERO ELLOS… ¿APRENDEN?

El siguiente texto está dividido en tres partes, en la primera parte se dan a conocer los diferentes postulados:

1. La materia que explico es muy interesante y ella sola puede atraer la atención de los alumnos. 2. Los alumnos son capaces de retener e integrar una corriente informativa durante más de 50 minutos. 3. Los alumnos aprenden con solo escuchar. 4. Los alumnos son oyentes experimentados y hábiles en tomar apuntes.

5. Los alumnos tienen los conocimientos previos y el vocabulario suficiente para seguir sin dificultad las exposiciones. 6. Los alumnos son capaces de dirigir su proceso de comprensión. 7. Los alumnos están demasiado seguros de sí mismos para advertirles cuándo no están entendiendo algo. 8. Los alumnos pueden llevar a la práctica lo que han entendido.

Estos posteriormente se tratan más a fondo y desde el punto del docente; la segunda parte define que es estudiar, en qué consiste y cuáles son los diferentes métodos y técnicas de aprendizaje, finalmente en la tercera parte nuevamente se hace mención de los profesores pero esta vez sobre su competencia, es decir, de las características que tiene que poseer para llevar a cabo una enseñanza exitosa.

PRIMERA PARTE.

Es normal que los alumnos nunca se enteran de cuánto tiempo pasan los docentes planeando sus actividades y que crean que las actividades suceden por arte de magia, sin embargo es un proceso que requiere tiempo. Pero a pesar de las actividades ¿realmente todos los alumnos aprendieron lo mismo y de la misma manera? Enseñar puede equivaler a transmitir sólo información, si por aprender se entiende memorizar esa información pero aprender va mucho más allá, se trata de personalizar el conocimiento. Según Marilla Svinicki, profesora en la Universidad de Texas, existen ocho principios que influyen en muchas profesoras y profesores para seguir defendiendo la exposición como única estrategia de mediación en su método de enseñanza y para convencerse de que sus disertaciones magistrales son eficaces por sí mismas. También son mencionados por Christopher K. Knapper en su artículo "Is What You Teach What They Learn?”.

PRIMER POSTULADO. LA MATERIA QUE EXPLICO ES MUY INTERESANTE Y ELLA SOLA PUEDE ATRAER LA ATENCIÓN DE LOS ALUMNOS.

Como se menciona anteriormente, los profesores creen que solo por ser esa materia los alumnos ya la aman y tienen completo interés en ella, pero no es así, a continuación se explican ciertos factores.

¿Interesan a los alumnos las materias escolares?

La mayor parte de los alumnos identifica a sus profesores de acuerdo al método que aplica en cada una de sus materias, tomando en cuenta que estos destacan más en una que en otra. Ya que una materia puede ser impartida por diferentes profesores está a veces puede tornarse aburrida o interesante dependiendo del método de enseñanza. Muchos docentes son entusiastas en cuanto a su materia se refiere, pero no por ello quiere decir que su materia sea interesante para el alumno ya que como es bien conocido existen diferentes tipos de personalidades y por ende se deben aplicar diferentes métodos para captar la atención del alumno el mayor tiempo posible sin dejar de lado los objetivos del curso. Muchos de ellos aún se niegan a cambiar el método de enseñanza ya que argumentan que ciertas materias solo se pueden enseñar de cierta manera y es imposible cambiar el método, pero ¿qué pasa con los profesores que a pesar de tener materias pesadas y/o aburridas logran mantener el interés de sus alumnos o incluso incrementarlo? Es imposible ofrecer una explicación compleja y completa del desarrollo del interés pero se debe recordar que cuando se enseña, se enseña algo a alguien, no es suficiente dominar el tema de la asignatura; se debe tener en cuenta a la persona a quien se enseña y a las condiciones en que esto sucede. La relación de estudio puede establecerse cuando la situación enseñanzaaprendizaje se ajusta a las tres condiciones siguientes: 1.- La profesora o el profesor despierta y mantiene la atención de los alumnos. Se tiene que planificar la enseñanza de forma que establezca la relación de estudio entre la asignatura y el alumno. Por eso, hay que crear situaciones estimulantes para comprometer al alumno con su estudio, pero no tan excitantes que aparten del aprendizaje. Una clase debe, por consiguiente, comenzar

suscitando la curiosidad; Klausmeier y otros (1973) aconsejan proceder de la manera siguiente: 

Ofrecer estímulos nuevos con preferencia a utilizar los que ya son familiares al alumno.



Plantear interrogantes antes de aportar enseguida información.



Variar el ritmo o la intensidad de la comunicación verbal.



Hacer que el alumno participe en la discusión o en el proceso de aprendizaje, más que exigirle su atención pasiva.



Responder a las intervenciones de los alumnos con el fin de cuidar su participación.

El profesor debe procurar mantener e incrementar la curiosidad de sus alumnos usando diferentes técnicas. 2.- El contenido se expone de forma que aparezca con sentido. Numerosas investigaciones han demostrado que mantener ocupado al alumno despierta un interés mayor por el proceso de aprendizaje ya que al no tener tiempos muertos no tiene tiempo de desviar su atención, ellos deben estar conscientes de que hay nuevos conocimientos que aprender y que hay que prestarles atención. Un ritmo demasiado lento o con una información muy pobre, da a entender que no hay nada que aprender, que no merece la pena tomarse en serio el estudio, prestar atención o motivarse en su proceso de pensamiento. El alumno debe ser orientado, saber a dónde tiene que dirigir su esfuerzo, para conseguir vivir el éxito de su aprendizaje. Según Jean Berbaum (1991), para que se dé aprendizaje hay que cumplir tres condiciones. La primera es que exista un proyecto, que se vaya tras un objetivo. La segunda condición es adoptar un método, planificar una serie de situaciones que permitan desarrollar nuestras capacidades potenciales. Por último, la tercera condición es que el método dé los resultados esperados. No existe un único modelo de buena enseñanza: existen combinaciones más o

menos favorables al aprendizaje que, en última instancia, no son ni buenas ni malas. Por eso, el profesor debe: 

Especificar los aprendizajes que se espera alcanzar.



Conocer las características de sus alumnos.



Descubrir el ambiente propicio.



Crear actividades para aprender.



Ir cambiando las condiciones del aprendizaje con el tiempo y con el cambio de las características de los alumnos.

El sentido que pueda tener para el alumno el contenido de un curso dependerá también de la relación que se establezca entre ese contenido y su experiencia. Por eso, el uso de imágenes expresivas y de ejemplos (Anderson y Hidde, 1971) es un método eficaz para mantener el interés de un contenido. 3.- Los sentimientos del alumno se integran en la actividad de aprender. Constatamos que no guardamos todo en la memoria. Conservamos lo que nos interesa. Y el interés no es un problema de lógica. Hay hechos que nos impresionan y otros que nos dejan indiferentes. Existe, por tanto, una información subjetiva asociada a las informaciones que nos transmiten. El entusiasmo del profesor (Abrami, Leventhal y Perry, 1982) es un factor determinante del juicio de los alumnos sobre el valor de la materia por aprender. De ahí que no se pueda enseñar con indiferencia sin dejar huella en los alumnos. Un comentario positivo o negativo influye en el aprendizaje, comentarios que acentúen su importancia y su función hacen que el trabajo escolar sea propicio. A pesar de todo, el alumno tiene que sentir que está aprendiendo para mantenerse interesado; si por el contrario tiene un sentimiento negativo, este perderá interés. Por eso es importante planear. Ríchard Coté (1987) deduce cuatro principios pedagógicos ligados al efecto del éxito: 

El éxito aumenta el valor de las

asociadas

actividades

buscado.

intelectuales

al

aprendizaje

 

Eleva el nivel de aspiración y



La probabilidad de que crezca

el fracaso lo hace bajar

el nivel de aspiración va unida

El nivel de aspiración tiende a

al

subir el nivel del rendimiento.

posibilidades de éxito.

aumento

de

las

Es importante procurar que el alumno progrese siempre con conciencia de la posibilidad de éxito en su aprendizaje. SEGUNDO POSTULADO. LOS ALUMNOS SON CAPACES DE RETENER E INTEGRAR UNA CORRIENTE INFORMATIVA DURANTE MÁS DE 50 MINUTOS.

El segundo postulado hace mención sobre la retentiva del alumno, de acuerdo a ciertos estudios está comprobado que es muy difícil captar la atención del alumno y sobre todo mantenerla, pero aún más lo es saber si han entendido todo, entonces…

¿El trabajo del alumno se limita a guardar informaciones?

Cuando el método de enseñanza de un profesor descansa exclusivamente, o en gran

parte,

en

la

exposición

magistral,

podemos

sospechar

que

está

presuponiendo que la labor de los alumnos, en la clase, se limita a registrar la información que después ellos deberán comprender y asimilar. La tarea de los alumnos es, como mínimo, sacar la información "esencial" de las explicaciones y asimilarla de manera que les permita salir con éxito de las pruebas que han de superar. Pero esto supone algo más que un simple registro de información ya que no solo hay que analizar la información recibida, debe formarse un conocimiento propio. Generalmente, los alumnos lamentan tener que aprender a partir de numerosas y prolijas explicaciones, las consideran aburridas, pero con frecuencia las encuentran interesantes, aunque difíciles de seguir, contienen abundante información importante que es novedad para ellos, pero sienten que les falta el tiempo necesario para comprenderla y, sobre todo, para deducir su verdadera significación. Gracias a este problema el profesor debe recordar que para formular

un pensamiento crítico es necesario seguir una serie de procesos para finalmente almacenar la información “nueva”, ya que a veces esto es complicad los alumnos utilizan diferentes métodos, los cuales los ayudan a crear su propio conocimiento. Muchas veces lo hacen interviniendo en diversas ocasiones y de diversas maneras, preguntando, por ejemplo. Estos procesos ayudan a su memoria a formar sus propias conexiones, las cuales posteriormente pueden ser usadas y encontradas con mayor facilidad; como si fuera una base de datos.

TERCER POSTULADO. LOS ALUMNOS APRENDEN CON SOLO ESCUCHAR.

Los alumnos aprenden escuchando, son máquinas que captan todo al cien por cierto y son capaces de transmitir conocimientos como si recitaran un poema.

¿Basta con escuchar para aprender y hablar para enseñar?

Sin importar la edad que se tenga se puede aprender, una de estas maneras es auditiva, como cuando se aprende un nuevo idioma, quizás por eso las personas, siempre repiten frecuentemente que para aprender hay que prestar atención, sin embargo no todos aprenden de la misma manera, por esta razón deben tomarse en cuenta cada uno de los estilos de aprendizaje al compartir conocimientos ya que cuando un problema se presenta no se solucionará tal cual como se vio en clase debido a los factores externos que pueden afectar a dicho problema en ese momento. Es por esta razón que hay que aprender a aprender, a desarrollar estas habilidades en los alumnos para que posteriormente estos desarrollen sus propios conocimientos, no solo limitarse a hablar y estar estático en la clase. Rechazar la práctica del debate en la enseñanza es privarse de una fuente de información continua sobre el progreso de los alumnos. Una buena exposición tiene sus ventajas, ofrece nuevos conocimientos, proporciona el contexto necesario para su comprensión, destaca los puntos importantes y establece con claridad las relaciones que organizan el pensamiento en una materia concreta. La persona que expone orienta la construcción del saber de su oyente, resumiendo, subrayando,

repitiendo, sugiriendo y haciendo operaciones intelectuales pero mantener la exposición como el único elemento de un método de enseñanza ciertamente no sería lo más acertado; el proceso de aprendizaje debe estar bien organizado, debe utilizar diferentes recursos para despertar el interés en el alumno ya que todos aprenden de diferente manera. Los profesores saben muy bien que no basta con haber dicho algo para que los alumnos lo hayan aprendido, aprender no es algo fácil ya que requiere de diferentes procesos sinápticos, algunos lo hacen participando y otros solamente escuchando. Para agilizar este proceso y asegurarse que todos capten la mayor cantidad de información posible debe seguirse un método: debe presentarse la información nueva y relacionarla con lo que ya se sabe, debe guiarse el proceso de aprendizaje y hacer repeticiones, procurando siempre mantener interesado al alumno para que finalmente posea sus propios conocimientos sobre el tema analizado.

CUARTO POSTULADO. LOS ALUMNOS SON OYENTES EXPERIMENTADOS Y HÁBILES EN TOMAR APUNTES.

Los alumnos son capaces de transcribir todo lo que escuchan ya que saben escribir y tienen la habilidad para hacerlo.

Los alumnos son oyentes experimentados y hábiles en tomar apuntes.

Todos están de concuerdan en que los apuntes son de gran utilidad para los estudiantes cuando se aproximan los exámenes y para el estudio en general pero de igual manera se debe tener en cuenta que elaborarlos no es una tarea fácil ya que como se mencionó anteriormente, el audio no se procesa y se transforma en conocimiento inmediatamente, requiere de un proceso mucho más complejo. Además existen diferentes tipos de apuntes, están los que son copia exacta de lo que el docente dijo, los fotocopiados distribuidos por el asesor y que no se hace

ninguna anotación en clase porque esté así lo hace saber (solo es cuestión de comprender) y los que son hechos por el alumno en base a su comprensión. Muchos profesores dan por hecho que todos son capaces de absorber la misma información y de la misma manera; como consecuencia no se toman la molestia de dar al alumno unos segundos para procesar dicha información. Sin embargo los apuntes son, pues, útiles porque son un instrumento para producir un informe, un trabajo, un examen, una exposición, una tarea profesional, etc. Por lo tanto, una única razón justifica realmente tomar apuntes: disponer de informaciones que puedan utilizarse para una producción prevista, es decir, son la materia prima que formar el producto. Pero para llegar a esto, primero los alumnos construyen su modo de entender la materia. El saber no se comunica de forma prefabricada; se reconstruye en cada uno con la ayuda de los elementos de información transmitidos. La labor de los alumnos no es entonces reproducir sencillamente lo que se les ha dicho. Ellos siempre quieren intentar sacar una significación para sí de lo que les llega y en este proceso existirán errores, por lo que el profesor debe estar atento para guiar y estimular al alumno a formar su memoria de largo plazo. Cuando los apuntes no son más que la mera transcripción de estímulos auditivos, el análisis y la memorización son superficiales. Puesto que la mejor retención la asegura la calidad del tratamiento de las informaciones y no el tiempo de la repetición, tomar apuntes debería consistir en un ejercicio de análisis y de restructuración de las informaciones. Para ayudar a que esté método sea eficaz se deben implementar otro tipo de actividades al momento de transmitir ciertos conocimientos, como por ejemplo: usar cuadros que faciliten la asimilación por medio de figuras o palabras clave. Si esto se toma en cuenta, aunado con la relación de los conocimientos previos, los actualmente adquiridos serán más fácil de digerir, no sólo en los alumnos entregados a al estudio, todos estarán motivados.

QUINTO POSTULADO. LOS ALUMNOS TIENEN LOS CONOCIMIENTOS PREVIOS Y EL VOCABULARIO SUFICIENTE PARA SEGUIR SIN DIFICULTAD LAS EXPOSICIONES.

Para ellos es fácil entender, relacionar y tomar apuntes ya que sus conocimientos previos facilitan este trabajo.

¿Disponen siempre los alumnos de las informaciones necesarias para poder comprender?

Es frecuente algunos profesores organicen sus clases como un resumen de sus propios conocimientos, los resúmenes que estos preparan no les causan ningún problema pero sí a sus estudiantes pues solo cuentan con ello para crear sus conocimientos y en algunas ocasiones estos no son capaces de almacenar dicha información, caso contrario si hablan con sus colegas. Algunas veces los alumnos tienen los conocimientos previos y el vocabulario suficiente para seguir sin dificultad las exposiciones, pero en mayor parte de los casos pierden el hilo; en este caso es importante usar diferentes técnicas para facilitar el aprendizaje y la comprensión, se puede iniciar describiendo un problema, interpretarlo y finalmente explicándolo, pero para realizar este proceso es necesario utilizar analogías que sean fáciles de entender pero sobretodo que se relacionen con su vida actual, es importante usar diferentes tipos de ejemplos y definiciones y/o cuestionamientos o comparaciones con el mundo actual para que cuando en un futuro el alumno encuentre un problema similar sea capaz de interpretarlo. En pocas palabras debemos ayudarlos a progresar creando diferentes ambientes y no confundirlos más (si es que ya lo están). Se puede concluir que las exposiciones son de gran ayuda pero el alumno no siempre tiene las herramientas necesarias para comprender el objeto de análisis; en este caso el asesor debe proporcionarlas gradualmente.

SEXTO POSTULADO. LOS ALUMNOS SON CAPACES DE DIRIGIR SU PROCESO DE COMPRENSIÓN.

Ellos pueden aprender de manera independiente y resolver sus dudas revisando sus apuntes de la clase, son capaces de asimilar todo.

¿Tienen los alumnos verdadera necesidad de los profesores?

Un profesor que preparara y diera sus clases como un presentador de noticias de televisión, sin duda justificaría su modo de actuar con una forma de entender el aprendizaje. Se cree que un alumno es capaz, por sí mismo, de dirigir su proceso de comprensión, él sabe si comprende o no. Pero, ¿y si estuviera comprendiendo algo en sentido diferente del que pensamos que debería entenderlo? ¿No creería él que está entendiendo? ¿No se encontraría satisfecho?

Si la labor del docente fuera solamente comunicar informaciones estructuradas, el "transmisor" podría ser remplazado fácilmente por otro soporte del saber: libros, televisión, etc. Pero la enseñanza ya no se puede entender como la simple memorización maquinal de cadenas verbales o de contenidos preestructurados. Aprender es adquirir capacidades intelectuales que permitan pensar de forma diferente, es generar interacciones entre el mundo real y el teórico. Para lograr esto el alumno debe estar convencido de que lo que se le está enseñado tiene una utilidad. En este caso el profesor es quien coordina estas actividades y está obligado a dirigir la formación de saber del alumno proporcionándole la libertad para indagar si lo expuesto es verídico o no, debe ayudar a pasar de las concepciones funcionales a los conceptos científicos; generar interacciones relacionando

lo

aprendido

anteriormente

con

lo

nuevo

organizando

jerárquicamente la información para que esta puede digerirse más rápidamente por todos y no sólo unos pocos. Las estructuras de organización de las ideas o de las informaciones son ciertamente internas; sin embargo, se sabe que tales estructuras se manifiestan en la presentación de datos. Por eso, el profesor debe saber desarrollar habilidades y estrategias y por supuesto también cómo y cuándo utilizadas para obtener eficazmente los resultados deseados.

Actualmente uno está convencido de que se puede modificar notablemente la conducta de los alumnos, incluso la de aquellos que tienen dificultades. Igualmente, se está de acuerdo en afirmar que el alumno puede aprender por sí mismo pero aprende mejor cuando los profesores dirigen el modo de adquirir las habilidades poniendo el acento en la demostración y en el ejercicio controlado, por ello se concluye que el profesor y la interacción con los compañeros de clase es necesaria para desarrollar las habilidades deseadas ya que estos ayudan a activar el pensamiento, a tratar las informaciones nuevas y asegurar la sincronización de los conocimientos.

SÉPTIMO POSTULADO. LOS ALUMNOS ESTÁN DEMASIADO SEGUROS DE SÍ MISMOS PARA ADVERTIRLES CUÁNDO NO ESTÁN ENTENDIENDO ALGO.

Los alumnos están tan seguros de que lo que asimilan es correcto que no se toman tiempo para analizar si es así.

¿Facilitar a los alumnos que se expresen es suficiente para que lo hagan?

Un profesor que se siente demasiado seguro con la exposición no ve inconvenientes en que algún alumno lo interrumpa para preguntarle algo; para ser honestos se sabe que los alumnos rara vez exponen sus dudas ante un público, pero con toda lógica uno puede preguntarse qué riesgo corre un alumno que confiese con toda sencillez que no comprende. Se constata que, por regla general, son pocos los alumnos que se expresan espontáneamente cuando son sometidos a exposiciones en lo esencial de su aprendizaje. Ellos saben que pueden siempre plantear dificultades cuando no entienden. Pero, ante un profesor que "da su materia", ellos prefieren "dejarle que se exprese". Desde el punto de vista de los profesores, todo ha cambiado mucho: el aprendizaje se concibe dinámicamente, el alumno está invitado a adoptar una postura activa, pero para que este opte por esa opción debe confiar en que puede hacer algo, que puede influir en el resultado de la operación, que controla algo, por

poco que sea, para sus posibilidades de éxito; pero ¿dónde conciben ellos el éxito o el fracaso? Cuando se atribuye el éxito o el fracaso a causas estables, uno espera que toda nueva experiencia se asemejará a la anterior, pero para ellos es difícil percibir esos pequeños cambios que hacen la diferencia. La sensación de poder intervenir en lo que sucede es lo que aviva el compromiso y la entrega al estudio así que sí, se puede decir que animar a los alumnos que se expresen en el momento y circunstancias adecuadas es suficiente para que lo hagan. OCTAVO POSTULADO. LOS ALUMNOS PUEDEN LLEVAR A LA PRÁCTICA LO QUE HAN ENTENDIDO.

Los alumnos son capaces de poner a prueba sus conocimientos y solucionar problemas con éxito.

¿Basta con oír hablar de natación para que uno se arroje al mar... Y no se ahogue? Muchos profesores dan por supuesto que los alumnos llevan a la práctica con facilidad aquello de lo que oyen hablar pero siempre que los alumnos son colocados en una situación en la que se les pide que pongan en práctica los conocimientos adquiridos, ellos tienen que aplicar un sistema para resolver problemas. La enseñanza debe conducir a los alumnos a volver a utilizar todo lo posible sus capacidades recientemente adquiridas en todas las situaciones nuevas en las que afrontan un problema, aun fuera de la escuela. Los problemas se presentan de formas muy variadas. Se puede afirmar que existe un problema cuando se dan una o muchas diferencias entre una situación real y otra deseada. Fundamentalmente, la solución de problemas conlleva tres grandes procesos: el planteamiento del problema, la aplicación de los conocimientos y de las habilidades y la evaluación de la validez de las soluciones aportadas (Gagne, 1985).

La calidad del planteamiento que nos hacemos es la que determina también la rapidez con que llegamos a resolverlo, por lo que no, no basta con escuchar sobre cierto tema para aprender, se deben aplicar ciertos métodos. Pero… ¿En qué consiste estudiar? Como se sabe, estudiar no es una actividad fácil para los alumnos ya que requiere demasiada atención de su parte, requiere voluntad y actualmente esta es una cualidad que no todas las personas poseen, además no todos poseen el método adecuado de estudio. Los profesores hacen todo lo posible para que esta actividad sea más jovial, sin embargo, en el mundo actual, en donde estamos rodeados de tecnología, saturados de distracciones… no es una tarea fácil captar la atención del alumno pero si se saben utilizar ciertas herramientas es posible hacerlo. Robert Howe realizó un estudio sobre las horas que estos dedican al estudio y los resultados no fueron del todo favorables, entonces surgen las siguientes preguntas: ¿Por qué los alumnos prefieren pasar el rato en cosas vagas en lugar de prepararse para el futuro? ¿Cómo pueden los profesores motivar al alumno? Obviamente este no es un trabajo fácil ya que enseñar y aprender implica crear muchos vínculos entre estos dos conceptos, muchos de los cuáles es difícil formar con las diferentes personalidades y capacidades de los alumnos. Pero, ¿Qué es aprender? Aprender es utilizar lo enseñado en clase y ponerlo en práctica de la mejor manera posible para obtener un resultado satisfactorio, es sentirse orgulloso de este, es buscar nuevas alternativas para resolver problemas. Es decir, el aprendizaje es hacer la información propia. Pero no todo es bueno y malo en este proceso; algunas cosas positivas de estudiar son: hacer propio el conocimiento, el cual nos ayuda a resolver y entender problemas más rápidamente dentro y fuera del aula. Las negativas son: pérdida de interés por otras áreas (escolar/social), cansancio físico y mental, etc. El aprendizaje independiente no es algo que se dé a menudo en el nivel elemental, hay casos en los que sí pero no es muy frecuente; resolver tareas sin

un conocimiento previo no generará resultados positivos. Cuando lo que se quiere es incrementar el rendimiento escolar se deben crear ambientes agradables e interesantes que motiven al alumno a realizar ciertas actividades fuera del área de trabajo; para llegar a este punto con éxito es necesario proporcionarles los pasos a seguir, estos son; organización, control, elaboración y repetición. Además de seguir los pasos, el profesor debe asegurar que las actividades planeadas están relacionadas entre sí con el conocimiento previo para generar un conocimiento de larga duración; para lograr esto se deben fijar metas específicas y usar el material adecuado. Al finalizar este proceso es casi 100 % seguro que la clase se llevará a cabo con éxito y generará interés sin importar el grado de dificultad como consecuencia al repaso y anticipación de los alumnos desarrollando en estos habilidades superiores ya que no es lo mismo generar un conocimiento de pocas horas a uno que ha llevado días asimilar poco a poco con la guía del profesor. Durante este proceso no se debe olvidar mencionar a los alumnos constantemente que serán evaluados y en qué áreas deben prestar especial atención. Es en esta parte entra en juego la competencia de los profesores, en líneas anteriores se ha mencionado que enseñar no es fácil, sobretodo en estos días pero tener las competencias necesarias para enseñar implica tener noción, responsabilidad y obligación sobre lo que significa aprender; enseñar es eso, ayudar a aprender. Según (Lieberman, 1956) la enseñanza debe poseer 8 características, la primera de estas es prestar un servicio de calidad. Actualmente la educación avanza rápidamente pero no siempre en la dirección correcta, a pesar de esto hay muchas personas que se interesan por la investigación, es por ello que las universidades y algunas preparatorias promueven veranos científicos, como por ejemplo: los promovidos por Conacyt. Este tipo de proyectos motivan al alumno (sobre todo si este es becado) a dar lo mejor de sí mismos y prestar un “servicio” a la ciencia. La capacidad del alumno no está determinada solamente por el factor biológico, depende mucho del desarrollo que este tenga en el aula. Está comprobado que un alumno que tiene un buen desempeño es en gran parte por la motivación de sus

profesores ya que estos suelen prestar más atención a aquellos que son “más adelantados” y menos a los que no. De igual manera el alumno incrementa sus conocimientos y habilidades de acuerdo al grado de exigencia del profesor, esto para satisfacer sus propias expectativas; podríamos decir que da lo mejor de sí para aumentar su orgullo. Existen muchos factores que determinan el incremento de conocimiento en los alumnos, la mayor parte de ellos depende del profesor. Algunos de ellos son: 

Método de enseñanza.



Atención del profesor al alumno.



Nivel de exigencia.



Ambiente.

Lo anteriormente mencionado comprueba que tanto la dirección del profesor como la interacción con los compañeros de clase influye directamente en el desarrollo de los estudiantes, consecuentemente se puede decir que el proceso de aprendizaje sin estos dos factores es casi imposible. Para que exista el proceso de enseñanza es necesario contar con un proceso de interacción entre alumno, materia o conocimiento y alguien que enseñe, primero ocurre entre el profesor y el conocimiento, posteriormente entre profesor-alumno y finalmente entre el alumno y el conocimiento. Existen diferentes tipos de conocimientos, están los especializados y los pedagógicos, los que los profesores utilizan son los pedagógicos, por razones obvias se llaman así ya que están adaptados al proceso de enseñanza-aprendizaje y siguen ciertas reglas, es por ello que el facilitador considera el conocimiento pedagógico más importante, como consecuencia a esto presta mayor atención al método y conducción de enseñanza para finalmente evaluar el conocimiento de la mejor manera posible. Para lograr una evaluación satisfactoria son necesarias tres fases, la preactiva, interactiva y postactiva. En la preactiva se prepara elaboran los métodos, es decir, se planifica. En la interactiva se debe ayudar a recordar lo que ya se sabe, fijar objetivos, presentar conocimientos nuevos y relacionarlos con los anteriores, realizar interacciones,

correcciones y trabajos autónomos. En la postactiva se evalúa de la manera más adecuada para medir los conocimientos adquiridos.Para que la etapa postactiva se lleve a cabo con éxito es necesario seguir el método correcto. Está comprobado que los profesores más dedicados tienen mayor éxito con sus alumnos ya que ayudan no sólo a crear nuevos conocimientos sino a organizar los viejos para facilitar el aprendizaje de los nuevos.

Examen crítico: El postulado uno habla sobre el interés de los alumnos respecto a la asignatura y hace mención sobre las diferentes técnicas que pueden usarse para mantener dicha atención e incitar su curiosidad. Una de ellas y la considero muy importante, es la calidad del contenido, si no se tiene un contenido interesante el estudiante se distrae rápidamente con cualquier cosa que tenga a la mano, puede ir desde el celular, una charla con su compañero hasta prestar atención en cuántos mosaicos tiene la habitación en la que se encuentra. Es por ello que el docente debe enfocarse no solo en dar su clase sino en orientarlo de manera positiva para que este pueda desarrollar al máximo sus capacidades. Algo que se debe tomar muy en cuenta es el ambiente de trabajo ya que si no se cuenta con un ambiente agradable el compromiso de los mismos por la materia con el tiempo irán decayendo y contagiando a los demás.

El segundo postulado hace mención sobre cuanta información somos capaces de retener, al parecer es mucha en la memoria a largo plazo pero escasa en la de corto plazo; para lograr mantener esta información e incluso incrementarla es necesario relacionar los problemas actuales con las experiencias vividas ya sea en la vida personal o profesional. Además al igual que en el primer postulado, para que una información sea adquirida debe ser interesante y clara, no debe dejar lugar a dudas o especulaciones. Para facilitar aún más su adquisición deben crearse modelos para un almacenaje limpio, es decir, se debe presentar la

información, asegurarse de que el alumno o alumna la entienda y no queden dudas, la procese y finalmente la haga suya para crear su propio conocimiento. Nunca se debe considerar que transmitir-transcribir-memorizar es un proceso de aprendizaje eficiente.

El tercer postulado es muy importante ya que como bien dice, debe darse tiempo al alumno para procesar la información transmitida, no es una máquina que copia todo a la perfección para después recitarlo como un poema y mucho menos se desea eso, por el contrario, el alumno debe realizar un juicio para finalmente obtener sus resultados. Posteriormente a eso los debates son importantes ya que estos ayudan a consolidar aún más el aprendizaje correcto y a desechar el incorrecto.

El cuarto presenta íntima relación con el tercero, como bien se mencionó anteriormente, el ser humano no es una máquina que pueda reproducir al 100 % lo escuchado durante la clase. Para facilitar el proceso de toma de apuntes es necesario presentar diferentes modelos, esquemas e imágenes que faciliten la comprensión y personalización.

¿Disponen los alumnos de las informaciones necesarias para poder comprender? No, nunca se dispone al 100 % de toda la información para comprender un tema en específico, para poder entender al cien por ciento cierta información se requiere de muchos materiales, ejemplos o analogías que lo ayuden a relacionar los conocimientos nuevos con los viejos. Se debe seguir un proceso; se debe describir el tema a tratar, posteriormente interpretar y finalmente comprender, si este proceso no se sigue y no se tiene el material de apoyo necesario será una tarea difícil de realizar.

En el postulado número seis se habla sobre el proceso de aprendizaje independiente, lo cual es algo que se puede hacer si se tienen ciertos conocimientos previos, de no ser así, siempre, siempre se necesitará una guía.

Podría decirse que los maestros en cierto punto durante el proceso se aprendizaje no son necesarios pero sí lo son. Los libros, internet y otras fuentes de información pueden resolver muchas dudas pero las relaciones humanas aún más, si no se tienen relaciones humanas el ser humano se hace apático, estático y el mundo ni el conocimiento lo son, siempre están en constante cambio, cada día la tecnología avanza más. Es por ello que para lograr comprender ciertas cosas se necesita de una relación humana ya sea para hacer el ambiente un poco menos hostil o para tener experiencias y puntos de vista nuevos.

El postulado siete es un poco más complicado porque relaciona a los docentes, es verdad que a los alumnos no les agrada la idea de participar todo el tiempo en clase (a algunos sí pero no a la mayoría), ya sea porqué se cohíben por sus prejuicios o bien porque simplemente son así. El hecho de no participar no implica que el alumno no preste atención o que no entienda nada del tema pero esto es curioso, porque a pesar de que el docente abre espacios para el dialogo muchos no entran en este ambiente; como consecuencia a ello el docente debe buscar la manera más eficiente e interesante de motivar a sus alumnos a expresar sus ideas ya que es crucial para la formación del conocimiento. Por último pero no menos importante… el octavo postulado habla sobre hablar, de nuevo es escuchar; escuchar algo interesante puede hacer que una persona se enamore pero solamente si ese algo es lo suficientemente interesante como para despertar un interés intenso en nosotros. Escuchar ayuda a resolver problemas, escuchar porque oír es algo completamente diferente. Escuchar genera experiencias al igual que otras actividades, pero si se escucha atentamente aprenderemos a resolver problemas, como bien se sabe para resolver un problema primero se debe saber el origen, sin esto no tiene caso analizarlo a fondo, una vez que el problema es conocido debe evaluarse para posteriormente solucionarse. En muchas ocasiones solo se analizan una vez pero si este proceso se hace así siempre entonces tampoco es válido ya que existen infinidad de problemas, en diferentes formas y si solo nos limitamos a un estilo

cuando el mismo problema se presente de manera diferente no sabremos como analizarlo. Es como en las matemáticas, puede existir un mismo problema pero varias soluciones.

Como se sabe, enseñar no es fácil y estudiar de manera independiente menos, se ha comprobado que estudiar algo sin previo conocimiento no es algo que pueda hacerse, de eso hace mención la segunda parte del libro. Algunos profesores creen que con transmitir información es suficiente pero no es así. De acuerdo al estudio de Robert Howe los alumnos dedican poco tiempo al estudio y los que dedican más tiempo a este son los que tienen o quieren especializarse en algo o porque su trabajo lo exige. Por estas razones es necesario implementar diferentes técnicas que motiven al alumno a aprender e interesarse por diferentes campos, pero despertar la curiosidad y mantenerla no es algo sencillo, requiere de mucha paciencia y experiencia en el campo emocional ya que estudiar y aprender, como todo, tiene sus pros y contras. Una de estas técnicas es la evaluación, pero para llegar a este punto el profesor debe tener una planeación que asegure el aprendizaje del alumno. Evaluar constantemente es importante, no solo en el área educativa, ya que si no se evalúa no se puede mejorar, por esta razón no solamente se evalúa a los alumnos, se evalúa el sistema (método de enseñanza), docente y muchos otros factores que influyen en el aprendizaje de los alumnos. Es aquí donde se mide la competencia de los profesores; para medirlos se utilizan diferentes métodos y estos a su vez utilizan los suyos para evaluar a su alumno de la mejor manera posible. Si se obtiene un resultado poco favorable quiere decir que alguna parte del proceso de enseñanza que estos usan necesita atención inmediata. Por el contrario, si el resultado es lo bastante favorable se debe seguir utilizando el mismo método. Para obtener resultados favorables deben usarse 3 etapas en el proceso de planeación: preactiva, interactiva y postactiva; además está comprobado que los profesores con mayor éxito en su retícula son más dedicados en cada una de estas, por lo que se recomienda amar lo que se hace.

Conclusiones:

De acuerdo a los temas analizados anteriormente se puede concluir que para el arte de la docencia se necesitan muchas cualidades y habilidades, las cuales se van desarrollando con el tiempo y la experiencia. Enseñar no es algo fácil, por lo tanto nunca se debe de dar por sentado que nuestro método es cien por ciento eficaz y eficiente, además se debe estar en constate evaluación para poder mejorar, ya que si no se evalúa no se puede mejorar. De igual manera se debe tomar en cuenta que todos los alumnos son diferentes es por esto que cada uno de ellos debe ser tratado de una manera distinta y para lograr que todos comprendan la información que se desea se deben de aplicar diferentes métodos para mantener la atención y despertar el interés en ellos. Enseñar no es una tarea sencilla pero tampoco imposible; el docente nunca debe cerrarse al decir que porque es una materia difícil no puede enseñarse de diferentes formas, solo debe prestar atención a sus alumnos para identificar la manera en que estos aprenden y desarrollan los conocimientos nuevos con los anteriormente obtenidos. Algunas técnicas que este puede usar es la evaluación constante y no son necesariamente evaluaciones escritas, pueden ser repasos durante las clases o bien, la más sencilla y eficaz que puede utilizarse es el uso de tareas ya que al tener un control sobre estás se tiene un control sobre el método de aprendizaje y estudio del alumno, cuando se utilizan este tipo de técnicas el profesor se asegura de guiar el conocimiento del alumno. Otra técnica eficiente es la realización de vínculos entre materias y entre estás con el mundo real ya que al hacer enlaces de este tipo el alumno es capaz de resolver diferentes tipos de problemas y con ello crear nuevos conocimientos. No se debe olvidar que para llegar a este proceso el profesor tiene que trabajar diferentes áreas, es decir, este debe preparar su clase con anticipación, debe ver ¿Qué se va a enseñar? ¿Cómo enseñarlo? y ¿Cuándo enseñarlo? Las competencias de los profesores son muy importantes ya que la mayor parte del tiempo la calidad de los resultados

obtenidos al final de curso dependen de sus habilidades para planear y presentar su clase. En pocas palabras, depende de su dedicación.